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abr 30

QUINCENA COMO HOSPITALERO VOLUNTARIO (II). AL SANTO PASEANDO Y AL PEREGRINO SANGRANDO

El Camino
Hospitaleros entrante y salientes
Los peregrinos

El albergue en el que hemos trabajado Estrella y yo durante una quincena pertenece a una cofradía.

No tengo muy claro qué se supone que es una cofradía, en la práctica es como un casal fallero pero más elitista y que en vez de quemar fallas y tirar petardos sacan a pasear al santo y montan comilonas. Una escusa para juntarse como cualquier otra, solo que van del palo religioso.

Cuentan que Hace 900 años su santo patrono fundó este pueblo, y que se volcó en ayudar a los peregrinos. En la actualidad ellos siguen volcándose, pero en ser ayudados por los peregrinos.  El pueblo entero parece un parque temático sobre el Camino de Santiago, donde se cobra a precios abusivos cualquier necesidad que el caminante pueda tener.

 
Pastelería artesana en pleno Camino. No ponen el precio fuera, pero te enteras bien cuando los pesan:  a  48 euros el kilo. Como el platino.
Puestecitos-Feria de muestras del Camino

El asunto ha degenerado bastante, hasta por entrar a la catedral cobran  3 euros. No es bonito por parte de los comercios que abusen de los que no tienen otra opción. Pero a fin de cuentas, vivimos en la jungla del capitalismo y cada cual se busca la vida.

Lo que no soporto es la hipocresía, el que en esta cofradía se las den de cristianos y piadosos cuando tienen una avaricia más que sospechosa.

Los hospitaleros voluntarios trabajamos gratuitamente siempre que sea en albergues de donativo y por ayudar a los peregrinos; nunca en albergues privados que cobran un precio fijo y que por tanto  deben contratar y pagar a sus empleados.

Pues bien, muchos miembros de la cofradía nos han presionado para que no dejásemos subir a los peregrinos sin echar antes el donativo, hasta darnos vergüenza ajena. El interés por los peregrinos se esfuma una vez echan el dinero en la caja. En muchas ocasiones me he sentido como en el banco, donde está generalizándose la figura de los “agilizadores comerciales”, como perros ovejeros azuzando al personal.

Las discusiones que tuvimos con ellos fueron públicas y cada vez mayores.

Quizás alguno piense que a fin de cuentas no ponen precio fijo y que deben de pagar el mantenimiento del local, verdad?

Pues bien, si no ponen precio fijo es porque de hacerlo les tocaría pagar nóminas, las de estos hospitaleros voluntarios que estamos 24 horas al día, es decir, tres jornadas laborales por cada uno de nosotros. De esta manera tampoco pagan impuestos como cualquier otra empresa, pues son una entidad religiosa “sin ánimo de lucro”.  En cuanto al local es de la iglesia, y tampoco pagaran Ibi ni nada.

Y ahora voy a descubrirte algo, querido lector. Da igual que seas creyente o no; que te gusten las cofradías o no. Tu estás pagando a las mujeres de la limpieza de esta cofradía con dinero publico. Y también pagaste, entre otros,  estos 1,3 millones de euros de subvención que les dieron.

Subvenciones públicas y de cajas de ahorro ahora liquidadas entre otras.

Haciendo media entre los 10 peregrinos diarios de Enero y los 200 de Julio, y calculando unos 5 euros de donativo medio… Dónde van los 600 euros diarios que ganaran? 18.000 euros al mes.

Todas las tardes llega la priora con su marido, se llevan la caja a donde no les ven y se llevan el dinero. No dudo de la honradez en concreto de la priora saliente. Pero creo que la mujer del Prior debería ser como la del César. No solo debe ser una señora, si no además parecerlo.

Cualquier organismo público o que reciba subvenciones debería tener sus cuentas publicadas y totalmente desglosadas. Que no nos insulten la inteligencia como cuando ponen esos inmensos paneles donde escriben el presupuesto total de una obra hasta el último centimo. De qué sirve eso si no tenemos acceso a su desglose? a ver dónde y con quien se lo han gastado ?

Publico aquí el email que he enviado a la asociación de hospitaleros voluntarios, ahí cuento con más detalle el “Yang” de esta experiencia.

Próxima parada: Camino de Santiago!

2 comentarios

  1. Lola

    Es curioso lo que cuentas pero tan real en todos los sitios ni la cultura , ni la música, ni el cine , vamos, ni la piscina municipal al final resulta ser que no hay nada gratis , tampoco en la religión , el señor don dinero se instalo en la vida de todos haciéndose el sumo sacerdote, una pena , al final tiene que ser una decisión personal enseñar a la gente a comportarse como dios manda.Y POR QUE NO SALTARSE LAS NORMAS

  2. Elveranomaslargo

    Es que la avaricia ciega mucho, y no tiene límite. Pero si es un negocio lo sabes y lo tomas o lo dejas según te interese. Lo repugnante de esta experiencia es que vayan con la piel de cordero del rollito religioso y piadoso para lucrarse y que encima reciban semejantes ayudas públicas y de cajas de ahorro rescatadas.

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